31-12-2006

Viña del Mar

No es incidente pasar un año nuevo en esta ciudad, cuna de mis mas inolvidables recuerdos y artífice de buena parte de mi juventud mas insolente y des-inteligente. Afortunado de partenecer a ciudad tan noble, de cálido viento y ancha espalda

24-12-2006

Faith No More en Viñam del Marm

Si mal no recuerdo eran como las 22:30 hrs de un buen día de Febrero de 1991 y yo caminaba junto a mis compañeros de manada en las cercanías de Vilches, íbamos directo a una cena de camaraderia entregada por nuestros guías, para que los lobatos se sintieran un pococ más agusto con la disciplina militar encubierta que habita en lo más profundo del espíritu scout. No viene al caso decirles, que esta institución paramilitar fue creada por Robert Baden Powell en áfrica, con el fin de concientizar a las juventudes británicas de las ventajas de conocer el territorio enemigo para conquistarlo y sacarle mayor provecho.

En fin, veíamos el Festival de VIña del Mar animado por un robot conocido como Antonio Vodanovic y una ramera a sueldo millonario que hacíase llamar Paulina Nin de Cardona en aquellos tiempos lejanos de cordura.

Nosotros niños, nos asombramos al ver a 5 personajes del todo inusuales en un país que reciém salía de una dictadura que nos alejó de todo el quehacer cultura (y contracultural por supuesto) mundial, y bien, ahi en medio de la nada, en la primera comida caliente de la semana, con cubiertos, lejos de nustras familias, con barro en las orejas y exhaustos de hacer jugarretas al aire libre, un estúpido hombrecillo bramaba sobre nuestra inmaculada concha acústica, saltaba constantemente mientras vomitaba algo asì como el sonido de un rap, entre guitarras metaleras, un bajo estilo funk metal, un teclado mariconcito y una batería que mas bien podría ser la marcha de 10 tanques panzer hacia polonia.

Esa noche no lo supimos y tampoco lo pudimos entender en Santiago de vuelta a la tutela parental. Sin embargo, algo ya era distinto. Mis padres temían que mis ojos podrían haber visto semejante espectáculo y yo sin saberlo, ya sentía eb mis entrañas que mis padres, por los proximos 7 años (tenía 12 en ese entonces), serían un par de carceleros dispuestos a todo con tal de que yo me alejara del estilo de vida, vestir, cantar y escuchar de aquellos moustros que gritaban en la Quinta Vergara. Bien, se equivocaron y de hecho, les gusta haber cometido ese error.

A todo esto, la banda se llama FAITH NO MORE, y no he podido escuchar algo mas alucinante desde esa noche. Gracias a Mike Bordin, Roddy Bottu, Billy Gould, Jim Martin y Mike Patton por continuar tu carrera musical con la indecencia requerida.

22-12-2006

Aproximaciones al Concepto de Alteridad. ¿es necesario respetar al otro siempre?

Luego de indagar un poco en la literatura antropológica más básica nos encontramos con un concepto del todo relativo, difuso y susceptible a todo tipo de interpretaciones, a saber: La Alteridad. Según Tzvetan Todorov, filósofo ruso auto exiliado en Francia ante la emergencia del régimen stalinista, la Alteridad corresponde a un constructo analítico sistemáticamente oculto en la historiografía occidental desde sus albores bajo el eufemismo de “enemigo" o “exótico” o en términos prácticos, todo aquello ajeno a la mismidad de Europa dispuesto a ser mutado en correspondencia a los intereses de quien lo describe, es decir, el europeo. Dicho de otro modo, la alteridad en tanto concepto nacido en el estudio de las sociedades occidentales, da cuenta de grupos sociales con participación concreta en la realidad cuya forma de organización, conjunto de costumbres y creencias, e incluso apariencia fenotípica, se presenta ante el grupo que observa como un universo totalmente distinto en todos los aspectos posibles de describir.

La emergencia de la Alteridad como concepto se debe en general a la expansión imperialista del sistema económico europeo desde el siglo XV en adelante, y se convierte en problema de estudio científico, cuando los “otros” hacen soberanía efectiva en territorios colmados de recursos naturales fundamentales para la conservación del modelo capitalista comercial ad-portas de transformarse en capitalismo industrial en los albores del siglo XIX. El problema es el siguiente: ¿cómo legitimar la usurpación de recursos ajenos que nuestra cultura considera valiosos, y a la vez, desaprovechados por quienes habitan sobre o entre ellos?. Como la pregunta escapa al marco jurídico adentrándose en la teoría del valor, la respuesta fue de índole político y práctico: el otro está destinado (léase en ingles doom) a sucumbir ante las prerrogativas del grupo conquistador pues, su estado de la técnica imposibilita todo tipo de resistencia militar imaginable y el mismo (occidental) está tambien obligado a inyectar por la fuerza su forma de interpretar la naturaleza, para integrar de modo desventajoso a los conquistados, quienes ahora pasarán a formar parte del mundo oficial, como un anexo proveedor de materias primas, trabajadores nulamente cualificados y mercado de consumo esclavizado a la industria foránea. Eso en buenas cuentas es lo que se ha conocido como civilizar en nuestra noble historia universal.

Afortunadamente el concepto de Alteridad nos es útil para intentar explicar fenómenos sociales menos tristes que la colonización y conquista. En psicología por ejemplo, la alteridad es fundamental en el período de la adolescencia, pues la imagen del otro, permite por defecto, mediante la comparación y proyección, constituirnos como una mismidad. Dicho de otro modo, nos enteramos de nuestra individualidad sólo luego de cotejarnos en sociedad otros distintos a nosotros, y por lo tanto, nos reconocemos como únicos en loa medida en que somos distintos al otro. Suena obvio o estúpido, pero no es de otro modo. Fíjense en un quinceañero que ha comprendido tardíamente que el mundo es injusto, que no cree en dios y que el mundo fue y será una porquería; ante este dilema decide ser punk y para sentirse tal requiere quizás por un imperativo interno incomprensible, mostrarse al mundo entero como otro, con el fin de sentirse distinto. Si el ímpetu juvenil madura en una forma de ver el mundo similar pero más moderada, lo más probable es que el mohicano y las cadenas puedan bien ser reemplazadas por una corbata y un buen traje, pues la personalidad de este ex adolescente ya goza de mayor firmeza y no necesita mostrarse al mundo como otro, pues la diferencia ya se a transformado en un estilo de vida.

El concepto de Alteridad también permite abordar fenómenos sociológicos como la interacción de distintos grupos y actores sociales al interior de un Estado determinado. Si entendemos al Estado como Hobbes y el Leviatán o como la institución que monopoliza el ejercicio de la violencia, mediante el imperio de la ley impersonal y objetiva, no obstante debemos reconocer que en su seno, dentro de lo que llamamos nación (la gente de a pié que vive y trabaja sin saber necesariamente de estas discusiones filosóficas) existen subgrupos sociales que conviven y se organizan de un modo que desafía los parámetros impuestos por el todopoderoso Estado, pues los contradicen directamente como anarquistas u opositores recalcitrantes, o bien los ignoran en pos de ideales mayores como evangélicos cuya nacionalidad habita en la ciudad de dios y no en la de los hombres o las minorías indígenas que responden a una ética anterior a la constitución de los estados modernos. Estas sociedades que escapan al modo de vida que impone el Estado a través de sus instituciones y leyes son una Alteridad inherente a las sociedades modernas, participan de la sociedad en su conjunto mediante el mercado del trabajo, pero se alejan de él en lo respectivo a modos de vida e ideales trascendentes. Sin embargo todos juntos, en ejercicio dialéctico o en franca cooperación, construyen la sociedad del futuro y es el ejercicio del concepto de Alteridad el que ha logrado reconocer el valor histórico de estas minorías olvidadas y muchas veces discriminadas o francamente perseguidas.

Ahora y a la luz de las reflexiones anteriores, dejo en el tapete una pregunta fundamental que no responderé pues no conozco su solución pues socava en lo más profundo los cimientos de mis constructor conceptuales y teóricos.

¿Qué hacer cuando nuestro otro se transforma en nuestro Némesis, o peor enemigo? ¿Cómo responder con tolerancia a un otro que tiene por principio máximo eliminar a sus diferentes por el bien de su mismidad? ¿Es lícito asesinar a un nazi porque asesina? ¿Acaso borrar la diferencia no es su objetivo máximo? ¿Qué hacer cuando nuestro otro es nuestro jefe, lo respetamos cómo respetamos al mapuche, con quien nos conmiseramos sólo porque se encuentra en desventaja económica y política frente al enemigo?

A fin de cuentas

¿Cómo comprender a quienes aún magnifican a Augusto Pinochet quien a la luz de los datos históricos es el peor de todos los presidentes de Chile?

De seguro el concepto de Alteridad al cabo de una generación solucionará nuestra truncada reconciliación, sin embargo mi corazón impide que comprenda siquiera en lo más mínimo que alguien, de nuestra clase social, apoye a quien a matado para la consecución de un objetivo obtuso y egoísta.

12-12-2006

APODERARSE DE LA HISTORIA QUE NOS PERTENECE.


Le guste a quien le guste debemos arrogarnos la misión de construir la Historia que nos ha quitado quien muere en estos días, debemos ensuciar la imagen que se ha elucubrado a su alrededor como un halo expiador de los más graves vejámenes a la naturaleza humana, debemos decir DICTADOR, ASESINO, LADRON Y GENOCIDA, en su justo peso semántico para que las generaciones que nos suceden no confundan los dichos de los perros falderos henchidos de poder ajeno, y se asomen así al escenario de la historia con la verdad construida desde el dolor que nos dejó y con la venganza de quienes tenemos las manos sin sangre y las gargantas heridas por gritar por más de 30 años LIBERTAD.

Si queridos lectores, nos espera ahora la tarea un tanto agria de arrebatarles el discurso oficial a quienes lustraron las botas del dictador, debemos destruir la imagen de quien aún sigue siendo tratado con eufemismos por la prensa y la politiquería chilena, heredera de un modelo económico cuyos resultados han sido las funestas desigualdades que nos destacan en el resto del mundo y que no aplacan en un solo milígramo, las muertes que fueron planificadas desde el Estado y las Fuerzas Armadas en el más puro ejemplo de la utilización de estas instituciones como instrumentos de clase.

Me van a perdonar quienes no comprenden el rencor de estas líneas, sin embargo siento envidia al escuchar las opiniones extrangeras sobre el proceso de cierre de una época histórica, hablan con los epítetos correctos para quien goberna acumulando todos los poderes del Estado, a saber DICTADOR, cuya legislación emana de Decretos con Fuerza de Ley que prescinden del normal debate que debe efectuarse en la institución que encarna la representación de los pueblos. Debemos llamarlo ASESINO, pues no cabe otra definición a quien planea el exterminio sistemático de sus adversarios políticos con máquinas muy bien aceitadas de inteligencia, conocidas como DINA y CNI. Es GENOCIDA quien barre con grupos enteros de personas que niegan su poder autoinferido. Y por ningún motivo es DEMÓCRATA y PRESIDENTE quien quiebra a placer el Estado de derecho para satisfacer su propia fanfarronería de huaso emigrado a puerto, criado con los resentimientos propios de una madre ignorante y que se escuda en una Constitución hecha a medida por un grupete de amanuenses cuyo únuico objetivo es perpetuar su régimen desapegado a todo tipo de lógica jurídica-

Ya se ha levantado la imagen del legitimamente elegido presidente Salvador Allende, los prohombres que aún le sobreviven lo han hecho como corresponde, levantando una estatua en su honor en la plaza donde sólo descanzan para la posteridad quienes han dado su vida por este país. Comienza ahora la guerra sucia, la de demostrar la verdadera cara de este hijo bastardo de una República pocas veces tan maltratada, de aquel que pretende rencarnar la memoria de O´Higgins y Portales, hombres que por lo demás defendían el primero los altos valores de la República y el segundo, insistía en que los militares debían servir al país y no servirse de él.

Debemos decirle al mundo y a nuestros hijos que no es sino LADRON quien se apropia de dinero ajeno y ESTAFADOR, quien lo hace de dinero público y que es el primer mandatario o des-dignatario en enriquecerse ilegalmente mientras dirige el país.

QUE VIVA POR SIEMPRE LA IMAGEN DE PINOCHET COMO EL PEOR DE TODOS

11-12-2006

Q. E. P. No D.


La alegría demostrada por el pueblo chileno la tarde del 10 de diciembre de 2006, a partir de las 15 horas aproximadamente, enmascara un problema profundo atingente a la justicia chilena y a la inoperancia que muestra respecto de su funcionamiento en tanto poder constituyente del Estado y como institución de la República, encargada de velar por el cumplimiento de las leyes y castigar a quienes las infringen sin importar su status o posición social, pues la Ley es un imperio que trasciende las personalidades como una de las facultades privativas del Leviatán. Así se dispuso desde el siglo XVIII gracias al valor histórico ya indiscutido de la Revolución Francesa, así se pide que sea, y así se dispone en nuestra Constitución, la misma que fue escrita a sangre y a fuego por quien suscita el cisma de un pueblo que clama por redención.

Este lado ineficiente de nuestro Estado es la alegoría de una nación enferma, lisiada, carente de la movilidad de una de sus extremidades fundamentales que espera una vez al año un espectáculo patético que satirice el dolor ajeno con pompas faranduleras conocido por todos nosotros como Teletón. Aquel show idiota amilana el dolor radical de quienes sufren impedimentos corporales, pero no elimina ni aplaca la discriminación; así es pues, la algarabía de este domingo glorioso no expurga los pecados del genocida, ni termina con el dolor de quienes sobreviven a los asesinados por su inmundo sable de soldado (1), pero nos obsequia una alegría inconmensurable al saber que el séptimo infierno narrado por Dante, espera a los genocidas y traidores de la patria con suplicios incesantes secula at secularum.

(1) Recordemos que soldados eran aquellos guerreros normandos, daneses y finlandeses surgidos luego de las invasiones escandinavas en Europa central cerca del siglo X, que accedían a pelear incluso contra sus propios hermanos luego del pago de una suculenta recompensa conocida en ese tiempo como SOLDADA. Está demás explicar el significado de esta palabra teñida de traición y oportunismo. Nota del Editor.

La muerte de Augusto José Ramón Pinochet Ugarte nos ha mostrado nuevamente el facilismo del Estado chileno incubado con negligencia por la rancia oligarquía chilena desde los albores de nuestro adolescente país, cuyo fin se avizoró en el gobierno de Salvador Allende y cegado de raíz por una traición inédita en nuestros anales. Los problemas que imposibilitan la conformación de Chile como nación cohesionada y próspera se han solucionado siempre con recetas improvisadas, providenciales o bestiales, la elaboración de la Constitución de 1925, la muerte impune del peor de todos los dictadores y el bombardeo de nuestro palacio de gobierno en 1973 son ejemplos claros de cada una de estas situaciones.

Nuestro país y los personeros que encarnan la voluntad general de este dolido pueblo, no ha sabido abrirse camino en la viscosa bruma que interponen los grupos que detentan el poder fáctico entre la verdad histórica y la justicia social y nuestro pasado.

Hemos sabido sin embargo y a pasar de los pesares, salir una vez más a nuestras alamedas prometidas por el Chicho a gritar embriagados de alegría, abrigados solo con la desnudez de la justicia divina, cantamos y bailamos la muerte de quien nos ha obligado a vivir en un país dividido por el dolor inundado por el rencor de la sangre inocente. Ayer tuvimos la última de nuestras pesadillas sobre aquel Chile oscuro herido por la sedición. Pero la mediocridad persiste, y amarga el sabor de la cerveza, pues solo la fantasía del imaginario medieval conocido como el Lucifer, vengará a quienes no acompañan a sus hijos hoy.

El peor de todos se ha ido y será ahogado por su propia arrogancia, recordemos que él mismo abogó por un juicio histórico que lo posesionaría en los gloriosos anales de nuestra República, lamentablemente, el glorioso escenario de la historia no soporta actuaciones mediocres como la del finadito aquél y, por otro lado, la redacción artesanal del relato de la memoria histórica que pasa día a día por los oídos de quienes construirán nuestro futuro no se construye en gabinetes de historiadores, ni en salones politiqueros insípidos y menos a punta de bayonetas, se escribe diariamente en las aulas y lo dictan quienes te odiarán por siempre, pues nuestras clases de historia, calan más hondo que tus discursos Augusto, y permanecen por siempre, pues se escriben con amor.

Púdrete viejo conchetumadre, que la historia te sepultará por siempre como el PEOR DE TODOS.

VAMOS A CELEBRAR!!!

Mirando hacia atrás en la historia
con la bala pasada
con la bala pasada
mirando atrás en la historia
con la sangre totalmente infectada
con el odio, con la rabia
del que perdió la batalla,
el rencor acumulado,
en la memoria me hace reventar.
Vamos a celebrar, vamos a celebrar,
vamos a celebrar, cuando muera Pinochet.

poema de primo
gracias

31-10-2006

DES-INTELIGENCIA MUSICAL. A Propósito de Discos Nuevos Y bandas Viejas

I. En el transcurso de este mes ha visto la luz este espacio de opinión escrita gracias a la motivación que ha proporcionado el descubrimiento de una serie de álbumes editados por bandas importantes en mi formación como crítico musical amateur. Si bien la importancia emotiva para quien suscribe de cada una de estas bandas es variable, todas cumplen de modo cabal con la idea vaga de lo que se debe esperar en un álbum nuevo de una banda vieja: revivir aquella atmósfera única proporcionada sólo por la particular e irrepetible unión de sus partes (los integrantes) entregada sólo por ellos y; entregar una nueva versión del anquilosado sonido que les proporciona la calidad de bandas de culto. Dicho de otro modo, lo que se espera de un álbum nuevo largamente esperado es que proporcione las mismas emociones que los anteriores sobre la base de la misma estructura sonora que las hizo objeto de culto, no obstante lo cual, se espera renovación y frescura en las composiciones con el fin de que sea este trabajo digno de descansar en nuestras estanterías llenas de recuerdos enfrascados en discos. El primer aspecto alude al sonido distintivo de la banda, el segundo a su capacidad de evolucionar y reinventarse.

I (I/II). Interrupción aclaratoria inevitable: Si Ud. conoce las bandas AC/DC o Iron Maiden, me imagino que más de alguna vez se ha preguntado como pueden hacer tantas canciones iguales entre sí, sin agotar la fórmula y sin caer en el tedio. He ahí la respuesta a la posible duda dejada poro el párrafo preliminar: esto es posible si y solo si la combinación de los factores que componen una banda de rock (a saber, líricas, actitud, estética, composiciones y calidad interpretativa de los músicos) dan por resultado algo más que la suma de sus partes y proporcionan un concepto nuevo e inexistente hasta el momento en la escena roquera de cualquier posible escenario temporal que los haya visto nacer. De ahí la idea de banda clásica o de culto.” Nota del Editor.

II. Probablemente muchos lectores y ávidos melómanos se mueven por los intrincados pasillos del gusto musical siguiendo la máxima que ha sido esbozada más arriba, no responder a estilos musicales determinados por definiciones discursivas estáticas y menos a modas que por definición son vacuas y pasajeras, sino a estímulos sonoros voluminosos (léase con profundidad) cuya expresión auditiva proporciona a nuestra psique la posibilidad de abstraerse de la realidad inmediata para inmiscuirse en paisajes auditivos abiertos a toda interpretación y libres de preconcepciones rígidas. Si señores, el rockanroll es un hábitat más que una expresión musical, pues llegamos a él ante la carencia de las certezas emocionales exigidas por el mundo de los humanos, en este sentido, el rockandroll es el música para adolescentes.

Confesémonos, alguna vez en los primeros peldaños de este viaje no siempre en subida que es coleccionar discos y bandas, malgastábamos nuestro tiempo en disquisiciones nimias sobre la calidad interpretativa de este o tal bajista, o el alcance generacional de las composiciones de una banda u otra, o sencillamente, la cantidad de notas que tocaba el guitarrista por cada unidad de tiempo, pensando que el virtuosismo era la clave de la búsqueda por bandas raras y de difícil digestión. Afortunadamente el tiempo abre puertas que la insolencia de la juventud no advierte y nos hemos dado cuenta que el estudio acabado de estas minucias convierte al sacrosanto acto de escuchar en una idolatría barata semejante al griterío de miles de calcetineras ante la belleza de un cantante que poco canta.
La verborrea intelectualoide que acompaña los primeros años de rockanrollero no es sino la expresión de un fenómeno mayor: la necesidad de explicar intelectualmente la complicidad emocional entre sonido y oído, que es anterior a las complejidades de una banda en particular, pues la piedra que desata las infinitas ondas en nuestro estanque de canciones no depende de la complejidad de las bandas, sino de la precariedad de nuestro ser y de la voluntad de encontrar el equilibrio.

III. No hemos perdido de vista el objetivo primario, las bandas que han sacado a la luz sus más recientes propuestas cumplen a cabalidad con estas definiciones destartaladas, tanto en la reproducción del sonido patentado con nuevos bríos, como en la posibilidad de entregarnos refugios sonoros creativos que no requieren de promociones y grandes campañas publicitarias, pues al ganarse nuestros corazones al vincularse con nosotros personalmente, se han asegurado su sustento mensual hasta que ellos se disuelvan o nosotros desistamos de vacacionar en el rockanroll. Sin embargo, el comentario que se anexa en esta ocasión desdice lo anterior situándome en una posición incómoda, ya que debo criticar a la banda que ha escrito el soundtrack de mis depresiones (por ende la identificación es absoluta y cae en la categoría de banda indispensable) y que lamentablemente no cumple en su último álbum los requerimientos de un sincero fanático. Esperamos 10.000 días por su regreso para decepcionarnos.

TOOL.
10.000 Days


Corría el año 1994 y concurrí a una fiesta adolescente profundamente pasmado por el sonido inigualable –en ese momento- de una banda llamada que mi querido primo Ronnie Bassili había descubierto hace poco tiempo, era Primus y desafiaba todo lo alguna vez escuchado por un fanático recalcitrante de las lloronas melodías de Queen. Primus era el otro extremo, la parodia que hace una banda de si mismos reciclando con clase el repertorio musical de sus infancias, teñido de infinita ironía y una interpretación prodigiosa de un instrumento que en el rockandroll no había tenido el protagonismo que Les Claypool le imprimía a las 4 cuerdas. Mi sorpresa fue mayúscula cuando en ese lejano antro veo a Jorge Miniño con una polera del grupo en cuestión. Los resultados son obvios, ayer precisamente me llamó invitándome a La Batuta a ver a su nueva banda.”

“El Primo y Yioryio se convirtieron en las dos patas de un trípode que no ha parado aún de explorar los recovecos más oscuros del rockandroll y esta historia cuenta uno de sus episodios más oscuros.”

“Cultivada ya una gran amistad concretada en una férrea cooperación exploratoria tanto en música como en el arte de aprender a vivir en un mundo de adolescentes deprimidos por el solo hecho de vivir, Jorge a pito de desconocidos motivos adquiere en la desaparecida tienda Fusión, un casete importado de una banda llamada Tool, era su segundo disco y gozaban de un admirable bajo perfil. Debo reconocer que no los comprendí de buenas a primeras, no son fáciles, oscuros como pocas bandas en los 90 y con texturas intrincadas y lazas que desafiaban la supuesta inteligencia de un muchacho acostumbrado a escuchar King Crimson y Rush, es decir, como que querían ser virtuosos pero no les salía. Eso es exactamente lo que pretendían y no lo supe avizorar.”

“Pasados los años aparece su 2º larga duración titulado AEnema y el cambio fue mayúsculo, no en la banda sino en quien se entrenaba para escucharla. La perfecta compenetración entre el texto y la sonoridad hacían de este disco una belleza jamás apreciada por los oídos inexpertos, un compendio infinito de texturas intrincadas que hacían de cada canción una obra en si misma, completa. Por otro lado mostraban a un hombre desprovisto de todo sentido de supervivencia y amor propio, que había plasmado a la perfección su odio hacia el mundo y a sí mismo en 14 piezas musicales densas y pesadas y fue en ese momento, precisamente cuando la voz de Maynard James Keenan declamaba suplicios autoinducidos por la depresión cuando me di cuenta de que esas canciones tenían algo de mí. Desde ese día que Tool se ha convertido en un hábitat tenebroso que esconde mi ira del resto del mundo.”

“10.000 días pasaron desde esos instantes de autodestrucción psicológica que aún me atormentan, hasta que un buen día de mayo del presente año me entero que el último álbum de una banda que bien podría ser una persona muy querida para mí, salía al mercado para ser consumida por mis oídos. He ahí la decepción, ya no hay pena en ellos, ya no hay flujo en sus aires, ya no escurre la obscura agua del pantano de sus notas. Se han convertido en un páramo seco carente de la vitalidad que los había definido como una banda de culto para las generaciones venideras, era ahora una banda discretas de canciones largas y tristes, pero que no avivan el fuego interior de quien sufre. Son ahora confesiones de un viejo deprimido, no himnos a la locura insana de quien odia para vivir, así como otros aman para respirar. La misma fórmula pero sin el núcleo rabioso que les dio la vida, son el barro de Adán sin el soplo divino que insufla vida, son 10.000 malgastados en vano en una espera de lo que no ha llegado. Un réquiem para Tool”

24-10-2006

daysleeper

Receiving department, 3 a.m.
Staff cuts have socked up the overage
Directives are posted.
No callbacks, complaints.
Everywhere is calm.
Hong Kong is presentTaipei awakes
All talk of circadian rhythm
I see today with a newsprint fray
My night is colored headache grey
Daysleeper
The bull and the bear are marking their territories
They're leading the blind with their international glories
I'm the screen, the blinding light
I'm the screen, I work at night.
I see today with a newsprint fray
My night is colored headache grey
Don't wake me with so much.
Daysleeper.
I cried the other night. I can't even say why
Fluorescent flat caffeine lights. Its furious balancing
I'm the screen, the blinding light
I'm the screen, I work at night
I see today with a newsprint fray
My night is colored headache grey
Don't wake me with so much.
The ocean machine is set to nine
I'll squeeze into heaven and valentine
My bed is pulling me,
GravityDaysleeper.
Daysleeper.
Daysleeper.
Daysleeper.

21-10-2006

Habemus Gato.


¡Muy buenas tardes amigas y amigos allá en la casa! enciendan sus televisores porque tenemos el agrado de anunciar que luego de la sensible partida de Ricardito, un nuevo gato cochino y con cara de ratero merodea la casa de la Señora Carmen y Don Carlos.

(aplausos en el estudio)

"Cuentanos es tan peludo como el "Finaito", como es que se llamaba"

(risas)

No sabemos José Alfredo, mejor preguntémosle a la dueña de casa a ver que opina

(bueno pa eso te pagan el sueldo no? pa que la gente hable... digo).

(la vieja se esconde y la hija menor escucha el último single de Robbie Williams que parece se ve bastante bueno)

"Recordemos José Alfredo que somos el canal oficial de Robbie Williams en Chile y que para los primeros igualitos a Robbie tenemos su último disco de regalo, el afortunado ganador se llevara una frazada Poncho Lindo y una pata´ en la raja.

(estupor en el estudio)

"Le pusieron nombre al gatito ya"

"no pregunte weás José Alfredo... adelante estudio

DE CULTO

Intentemos dilucidar a qué nos enfrenta la frase De Culto, me tinca que tiene sabor a algo añejo muy viejo, pero que es tan fácil traer a la memoria que nos saca una risa instantánea casi tan inocente como las que acostumbrábamos a mostrar en la infancia. De Culto pareciera trae reminicencias de lo que hacíamos cuando cabros chicos con todo el desparpajo de situaciones que implica estar creciendo, desde reconocer los olores de tus progenitores, hasta cargar con significados emotivos todo lo que nos es familiar y amable. El flashback puede ser activado tanto con la canción que nuestras madres escuchaban al fregar el piso, o bien, con el interminable programa de televisión que veían los viejos cuando llegaban desalmados después de por lo menos 10 horas de trabajo, en un país con Dictadura en cada esquina.

En este sentido, De Culto es una capsulita dulce con un jirón de nuestras historias personales entrelazadas en una memoria común, que no habla de política ni economía, sino de buenos viejos tiempos y de los queridos seres cercanos que compartieron esos instantes que duran miles de años. Esas chispas de HISTORIA que conforman lo que llamamos De Culto, viven en todos los chiches que puedan guardar siquiera un gramito de pasado, llámese canción, juguete, afiche, promoción o réclame, programa o lo que gusten. De hecho, el Culto por eso que nos hacía reír es una muy buena explicación al porqué la Historia nos es tan insensible en los libros. Nos gusta tanto que nos trastoca cuando aparece tan sencilla, propia y expresiva como en la fotografía anexada. Sencillamente el pasado frente a los ojos.
Por eso y mucho más no puedo parar de agregar todos los días algo al Libro Gordo de Barril.

http://www.fotolog.com/deculto

19-10-2006

Autobiografías Musicales con Poesía Ajena. High Fidelity the Movie


Decir que una película es buena sencillamente porque te encantó es triste, sobre todo si el filme en cuestión pasa a ser parte de tus cintas de cabecera, esas que tienen algo de ti en algunos personajes o reflejan de un modo imaginativo alguna experiencia que ha sido parte de tu vida. Hasta el momento no estamos diciendo nada nuevo, pues así hemos devorado nuestras novelas favoritas y eternizado las canciones que nos hacen llorar, así es como es, siempre hay algo de nosotros en lo que queremos.

Para ser sincero me cuesta hablar ocupando la palabra “siempre” o “nunca”, pero me es mas difícil decir indirectamente que entre el melómano y la canción hay una relación de autoafirmación que llega incluso al narcisismo o, es más, ejemplificar aquello diciendo que de ese modo nos enamoramos, encontrando algo de ti en ella, o algo que adolece nuestra precaria existencia y nos impele a explorar los ojos de quien amas buscando la llave al dilema que te mantiene hipnotizado a sus gestos (dedicados a uno mismo los más), esto es, por qué razón no puedes dejar de admirarla.

En la película “Alta Fidelidad” se abordan estos temas que ya varias veces alguno de nosotros ha conversado en la profundidad de la noche con los amigos indispensables que no necesitan explicaciones de tus actos, es una película auto referente narrada por Rob Gordon, un rockero anónimo que decidió vivir de una tienda de discos que sólo satisface su incesante sed coleccionista, quién aún no puede explicar como su vida terminó enredándose por una mujer de profundo encanto y abrumadora seguridad. Obviamente, la explicación habita las infinitas canciones que su cabeza reorganiza constantemente y cuentan la historia personal de un hombre de palabras parcas y oído agudo.

Es en este momento cuando el film nos propone una suerte de hipótesis de trabajo o bitácora de viaje: el significado de la brutal expansión de la música popular desde que la juventud se abre como mercado cautivo a la industria fonográfica en la segunda mitad del siglo XX, es que las canciones proporcionan una mitología personal sobre el sentido de nuestras vidas, a través de relatos simples y directos, escritos por ciudadanos de a pié que plasman sus desesperanzas en líneas melódicas de 3 a 4 minutos, donde el factor determinante de la creación no es la inspiración docta sino el desafío de congelar un estado de ánimo mediante un sonsonete familiar, que altere el cuerpo y nos impela a movernos, sino para llorar, a lo menos para subir y bajar el pie al ritmo sempiterno de los cuatro cuartos. Es el rock and roll el Mithos del adolescente de la post guerra y está llamado conformar una memoria común de sinsabores juveniles abierta a todos quienes estén dispuestos a explorarse, y encontrar en una canción el alivio del día a día.

No quisiera exagerar la nota y llegar a plantear una suerte de mesianismo en un film de hora y media, para nada, solo digo que la canción se hace poderosa y se muestra autobiográfica en la vida de Rob, el arquetipo de persona que busca en poesía ajena el reflejo musical de la realidad de los hechos cotidianos, que absorbe cada surco en el vinilo para conversar con un amigo lejano que sólo sabe dar consejos con una guitarra y que sabe, sin conocerte, exactamente como te sientes, pues sino, no sería capaz de escribir una canción. Es una película que trata de amores. Véanla.

16-10-2006

Q.E.P.D

"Hoy me acabo de enterar que mi existencia, aquella que creía inacabable, tiene fecha de caducación y no supera las 24 horas.

Son muchas cosas las que he hecho, llevo en mi memoria infinitas experiencias todas importantes, todas constituyentes de mi persona, sin embrago, la vastedad de experiencias que me quedan por vivir me turban el pensamiento. Y en eso que solo estoy pensando en las peores.

Creo que voy a partir por gastar $1000 en aquello, me apertrecharé con pipas y papelillos para un día, obviamente, escaparé con una fina selección de las canciones que han estampado mis vivencias con memorias sonoras.

Probablemente piense en asesinar con odio certero a cuanto conchadesumadre me haya cagado en a vida, o estuvo a punto, o no le importe lo suficiente como para dirigirme la palabra. Quizas intente violar a todas la mujeres que he querido amar y ya no podre jamas. Pero no. Quisiera irme en paz y dejar el odio de una vez en este mundo, no creo que me sirva donde sea que fuese a parar, de hecho, ya es una rémora aquí.

Besaría a mi madre, abrazaría a mi padre y copnversaría con mi hermana sobre todo lo que no debe hacer nunca en la vida, porque es muy divertido y es difícil deshacerse de eso. Me fumaría otro y correría a ver a mis amigos para organizar un funeral recordado como el más grande evento social del año (me pregunto si tendre amigos más alla).

Quisiera no morir virgen y casto, por lo menos saciado y vacío de tod amor, así que dedicaría al menos 6 de las 24 horas a besar y revolcarme con mis ex, mis post, mis no se qué, mis ojalá.

Lo que resta del día lo guardo para mi, por lo menos 4 miserables horas, a pensar en lo que fui y lo que dejé de ser y hacer, haré mi mejor esfuerzo por no llorar, a aferrarme hasta el último momento a esta vida que odie tanto. Pero ya me estoy muriendo

15-10-2006

LA SENSATEZ EN PARO. O el no-feliz día del profesor


Hemos estado pendientes obre el devenir cotidiano de nuestros queridos estudiantes desde que cayeron en cuenta de que mostrándose su poder, a modo de pavos reales, podrían llevar al tapete algunas discusiones que los viejos de mierda como nosotros ya obviábamos. Apreciamos una efervescencia pocas veces vista en nuestras calles y sin embrago, aun queda un dejo de amargura, algo así como una cerveza tibia una buena tarde de enero.

Pelean por una educación mas justa e igualitaria con argumentos tan contundentes que los petitorios debieron de agruparse en dos agendas paralelas, una que apela a la solución de situaciones coyunturales y al otra, que arguye cambiar el panorama estructural de una sistema que pide a gritos un cambio y un upgrade.

El punto débil habita en el seno del discurso enarbolado por los pingüinos: la excelencia académica. Es justo por supuesto, pedir que los profesores efectivamente realicen un trabajo profesional con el fin de ser tratados como tales, es justo también, apelar a una infraestructura y recursos metodológicos consonantes con el quehacer cotidiano de los negocios y el mercado laboral actual. No obstante, la práctica en el aula nos ha demostrado otra cosa. Es justo y necesario pedir aquello en la comodidad del pupitre sin arriesgar un centavo, sin cambiar la actitud frente al auto-aprendizaje. En otras palabras, la mediocridad se ha escudado en un movimiento social de proporciones históricas con el fin de elevar un petitorio potente a todos los agentes que inciden en el proceso educativo, pero, sin alterar la disposición y el talante del protagonista: el alumno. Se ha institucionalizado en su seno, el status quo.

Nacidos y criados en democracia fueron educados para pedir y alegar sin contemplaciones, pues fueron creciendo con padres y hermanos mayores que aún saboreaban la dictadura y se regocijaron con la alegría que aún esperamos. Nunca escucharon un NO por respuesta, no sintieron la desolación del Santiago de toque de queda, nunca vieron en la televisión a nuestro gran hermano omnipresente y todopoderoso. La democracia fue el vicio que nos heredaron (yo no luche por ella pero si me educaron para exigirla, y nací sin ella), mal entendida como lo chilenos acostumbramos a podrir las buenas ideas.

Presenciamos ahora le berrinche de niños que exigen salir el fin de semana a pesar que estén a punto de reprobar el año, a sabiendas que la escuela deberá cambiar su situación a la brevedad so pena de baja matrícula, mala reputación del establecimiento o sencillamente, el despido inminente del profesor que ha osado despachar a tan buen cliente.
El mundo ya funciona de ese modo y las leyes que dictan la vida social no encarnan en los espíritus las conductas cívicamente deseables, como ya es de perogrullo, y que aspiran a mutar las sensibilidades y llevarnos a un estadio social un poco más estable, al menos. La mediocridad ha llegado para quedarse y los pingüinos lo han demostrado tristemente, desde sus pupitres, piden que le mundo cambie para que sigan haciendo lo que mejor hacen: nada.

Lafloripondio

Nada mejor que comenzar este blog dedicando unas lineas a una de las mejores bandas de rock chileno de toda la vida. intento no exagerar al decir "rock chileno" pues la combinatoria de lí­rica, la puesta en escena y actitud frente al hecho musical, los ponen en una posición única dentro de la escena rockera de todos los tiempos. Han sabido combinar el chucherío chileno, con la maldita constumbre de la viveza y al picardia en un revoltijo de sonidos vivos que nos impele a mover los huesos.

Si bien en sus inicios la propuesta era mucho mas cercana a un punk no-wave, sazonado con arpegios crimsianos y una estética parca, hermética y desafiante, siempre pudieron fusionar la expresión sonora con la experiencia cotidiana de la chilenidad contemporanea, es decir, la memoria propia e inmediata, sin mediar tributos de ningún tipo ni la ya vapuleada cortesía por revivir folclores urbanos mas cercanos a lo kitsch, artificiales. Ellos exponen una chilenidad precaria y directa de un pobre cabro que vendí­a verduras y que no soñaba con ser estrella de rock, alguien quien nunca la importo tanto la música que hacía, pero si la que escuchaba.

Fue en ese momento, cuando las lertras que aludían al sacrosanto chino Ríos y homenajeaban surrealistamente al hospital para insanos de valparaiso, rescataban sin querer y sin cliches, al chileno medio, salvao´, bueno pa´l copete, que sabe manejarse perfectamente en la noche y lidiar con licenciados y traficantes, que le gusta trasnochar vez que puede y que tiene siempre un resquicio para hacer reir a alguien y manifestar su alegrí­a. O su mas abyecto descontento.
Al pasar el tiempo vimos como esa suerte de David Byrne con aire de cantor popular, se transformaba en nuestro Luca Prodan inyectado en paraguayos prensados, jugando a inventar folclores callejeros, pintando volados y pasteles perdidos en una calle que ni siquiera puede mencionarse. Evitando lo que no quiere.

Digo esto, y sin ánimo de criticar, porque el rock chileno hace ya bastante tiempo que consistía en hacer una letra en castellano, con un par de garabatos y algo que nos identificara para que sea nominalmente chileno, pero con una estructura musical absolutamente importada. La chilenidad de la flori no estriba en su denominación de origen, se fundamenta en la atmósfera chinganezca que crea, que da vuelta el mundo y nos transporta a un escenario liberador donde nos encontramos con un ritmo propio, no catalogable, sino un un escenario sorono que nos permite ser como los chilenitos nos hicimos famosos: picantes, flojos, de verborrea ampulosa para criticar el error ajeno y para sacarse los pillos y por sobre todo, siempre llano a olvidar el mundo, entregarse al carnaval efí­mero y arrepentirse mañaana de la juerga interminable.

Es Rock Chileno porque no suena a nada mas y solo podría hacerse aquí. Me atrevería a decir que eso ha sido logrado solo por los jaivas pero en otro sentido, ellos rescayaban una tradición cultural histórica, noble y con una belleza reconocida en el mundo entero. Estos giles de la flori, no rescatan nada, nos muestran guata al sol, con una chela en la mano, y con la otra haciendo un ademan pa seguir bailando, como mono

incapaz de generar calor corporal

"Los poiquilotermos son los organismos llamados ectotérmicos o “de sangre fría”, que no pueden regular significativamente su temperatura corporal generando calor.
Los poiquilotermos se caracterizan porque la temperatura de su cuerpo varía con la del ambiente. Se les llama también animales de "sangre fría". A este grupo pertenecen los animales invertebrados y además los peces, anfibios y reptiles."